jueves, 1 de diciembre de 2011

No quiero ser un clon


 Los momentos en estos lugares se espacian como las respiraciones de uno de los humanos que lucha contra mi, los despertares y los sueños profundos del Bar de Barbón son intermitentes como las luces de las calles que nos circundan, como relámpagos en un cielo nocturno, como chispazos de vida en un fluorescente renqueando a las puertas de su propia muerte.


El negocio no pasaba por sus mejores momentos, y gran parte de la culpa es de quien aqui se expresa, que de nuevo camina solitario por estas calles bidimensionales en que su principio es siempre el mismo y el final no suele variar tampoco de un dia para otro. La noche eterna me envuelve con su manto, mientras las farolas y los anuncios publicitarios de luz iluminan mi rostro a su propio son, tocando una canción sorda de colores destelleantes. Después de recorrer las mismas calles, girar en los mismos lugares, contemplar una y mil veces los mismos edificios que despuntan hasta el cielo hiriéndolo como si de una espada serrada se tratase intentanto abrirse paso hacia ese paraiso de blancas nubes y entornos tridimensionales de los cuales algunos se atreven a hablar.

Y, una vez mas, alli me espera mi eterno local, con su mirada enturbiada por la propia miasma que produce la ciudad me saluda. No necesita ni manos ni siquiera una voz cordial para darme la bienvenida, sé que está ahi para mi, y mi función es descubrilo ante los clientes que se aventuren por estas calles, a los viandantes que se dejen caer por aqui y que su destino este tan ligado al mio, como lo esta Mr. X a los designios de esta gris ciudad virtual. Vuelvo a abrir el cerrojo que con un sordo chasquido deja libre la persiana y esta sube hasta perderse de mi limitado campo de visión y abrir la penumbra del interior al mundo que le espera y a las visitas venideras.


 De nuevo, para variar en la tradición, el olor a cerrado golpea mis inexistentes fosas nasales...no puedo sentirlo, pero si que puedo percibirlo, como un mazazo con los dos puños juntos de Max Thunder, como un súplex de Axel Stone que hace sacudir tus sentidos y tambalear todo aquello que te rodea como si de un terremoto se tratase.

Ultimamente no habia tenido ocasión de abrir el local como venía siendo normal, esos extraños viajes a ese universo donde la tercera dimensión es una realidad y todos los objetos tienen volumen, el ver todo a través de otros ojos que no son los mios, al tocar y sentir cosas no compuestas por píxeles, a escuchar todo aquello que te rodea con una calidad muy superior a los gritos digitalizados con los que nos han dotado, con el sentido del olfato para deleitarse (y también repugnarse) con algunos de los olores que pueblan ese otro mundo y, ante todo, por el poder salir de esta rutina, de esta cárcel sin barrotes en las que todos estamos secuestrados y de la cual ninguno tiene la llave para volar libre y llevarse para siempre todo por lo que hemos sido creados y fabricados.

Me senté en uno de los asientos vacios que dispone el Bar de Barbón, eché un rápido vistazo aún en la penumbra, encendi la gramola con la canción de Shallow de The Poets of the Fall y dejé que mis fugaces y extraños pensamientos me inundasen una vez mas ,pero anclándome a este mundo al que ya estaba tan acostumbrado que nada ni nadie podría ya sorprenderme.

Y en esa realidad continué durante un buen rato, echando cuentas de lo que habia acontecido, volviendo a preguntarme miles de cosas sobre mi mismo, y por supuesto, también sobre todos aquellos que me rodean y con los que me he encontrado a lo largo de una existencia que parece no tener un límite aunque si muchos finales.

De mis compañeros de fatigas me parecia curioso el hecho de que algunos estuviesen cambiando, lamentablemente, no para bien.

Yo me conocia bien, y mis maneras de ver las cosas seguían siendo tan iguales como lo habían sido desde que se inauguró este local, e incluso algunos de mis seguidores siguen siendo constantes en sus conviciones y en su manera de ver la vida que a cada uno le toca soportar.

Pero otros, han caido en una vorágine oscura que los ha cambiado, son iguales en apariencia, con sus pixelados cabellos cayendo sobre su rostro, con sus ropas bicolores que jamas pasaran de moda, con su manera de andar de varios frames de animación y su rostro impertérrito ante cualquier circunstancia. No obstante, es ese el único parecido que tienen con su yo original, pues toda marca de personalidad, todo atisbo de pensamiento original y propio ha sido borrado del mapa como una partida ajena en un juego de rol de Megadrive alquilado en algún videoclub y la cual no nos importaba. 

Su mente se habia borrado de cualquier cosa que les conferiese una personalidad, de cualquier rasgo que pudieran denominar "suyo", y eso me apenaba y hasta las inexistentes lágrimas empujaban en mi interior por intentar salir por unos ojos resecos ya por no saber parpadear. Sentia tristeza ya no porque ellos habian dejado ser ellos salvo por su aspecto, tampoco porque ahora no eran mas que cascarones vacios que antes estaban llenos a rebosar de un sinfin de cosas, ya no porque ahora fuesen sombras de una entidad mucho mejor: sentia tristeza porque todo ello lo habian hecho con todo consentimiento y bajo las influencias de aquellas contoneantes criaturas de infinitas curvas, largos cabellos y voces acarameladas.

Ya habia perdido a varios amigos bajo el manto de seducción de Electra, incluso yo estuve tentado (aunque sin ningún éxito) por sus embrujos, pero al ver las cosas al otro lado de la barrera te das cuenta que han caido en un letargo tan largo como las simpatizantes de Electra quieran que dure. Se habian convertido en títeres de una función donde quien movia los hilos tenia las manos largas e inmaculadas y uñas pintadas que resplandecian bajo las luces de los focos. Como peones en una partida de ajedrez que podrían lanzarse ferozmente hacia una ficha enemiga que pudiera devorarlos sin ni siquiera ponerse en peligro, como actores y extras en una película en la que la directora pudiera hacerlos lanzarse por la ventana de un edificio sin poner debajo ninguna medida de seguridad.

Podria catalogarlos como zombies, aunque ese tipo de criaturas no existan en este mundo, pero mas ávidos de carne humana femenina que carne humana "en general". Y, como estos muertos vivientes, casos asi se expanden como una plaga, mires donde mires en este mundo de dos dimensiones, puedes verlos...clones de amigos que ahora ni siquiera puedes llegar a ver, clones de compañeros que has de pedir citación a sus respectivas parientas antes de poder verles la cabellera (si es que les queda y no se las han hecho cortar al cero bajo el mandato de su maestra y señora).

No es que sean casos aislados, e incluso entiendo y comprendo porqué lo hacen, en el mundo real en el que alguna vez me he transportado he escuchado aquello de "dos tetas tiran mas que dos carretas" aunque aqui de lo primero tenemos, pero de lo segundo no, pero el significado sigue siendo vigente sea donde sea que se diga.

Y me pregunto yo: ¿habrá alguna solución para ello? ¿Habrá alguna manera de mantener intacto lo que uno es cuando las vias de tu existencia están capitaneadas por alguien que no eres tú? ¿Hay alguna manera de tener control de esa sombra de ti mismo que se tambalea al son de los pasos de esos zapatos de tacón y el bamboleante trasero al que, a la mínima oportunidad deseas apegarte? Supongo que si, pero como dije mucho antes, el ver las cosas al otro lado de la zanja es como intentar calificar y criticar un videojuego sin haberlo jugado. Las teorias son muchas, algunas disparatadas y dispersas, otras mas acertadas, pero siguen siendo teorias que han de ser puestas en práctica y asi demostrar su valia si es que la tienen.

Almenos me alegro, de que una parte de esos compañeros hayan podido aguantar estoicamente y conservar lo que los hace únicos e inimitables, se han alejado de ser meros clones, de ser meros etcéteras en un texto enorme, de ser insulsos "bises" en la canción de la vida. Por  eso si alguna vez acabo cayendo en esa maldición, en ese hechizo femenino que aquellas como la que toca el piano en mi bar cada dia conjuran, quiero que me ayuden y me hagan reaccionar. Pues si de algo estoy orgulloso es por ser como soy y seguir siéndolo a pesar de los golpes que me ha dado la vida y, en su mayoria, los B.S.A.M!

Si de alguna manera pudiera comparar este fenómeno con algo en especial, seria al de un meteorito acercándose a la Tierra: el poder del amor es muy grande, imaginaos que estáis en una montaña rodeados de todos vuestros colegas y, arriba en el cielo, veis como una enorme roca de fuego y llamas se acerca desde los confines del espacio exterior. Ves como el cielo se torna rojizo, como una aureola anaranjada inunda el mundo y te quedas extasiado mientras el resto de tus compañeros te tiran de la ropa y te gritan que corras con ellos a un lugar seguro, a algún búnker o sitio similar. Tú te quedas impasible mirando el espectáculo, como las nubes se abren y se disipan por el inmenso calor, como el infinito ha mandado a los humanos un regalo ardiente y en envio urgente. Tus amigos no pueden hacer mas, te has convertido en una estatua que continua petrificado ante semejante acontecimiento interestelar, ellos salen corriendo con el rabo entre las piernas para ponerse a cubierto y finalmente lo consiguen. El meteorito choca contra la tierra, te arrasa como si fueses una hoja de papel de calcar en una fogata de San Juan, y lo mas que queda de ti es un recuerdo, el recuerdo de lo que una vez fuiste y , dificilmente, puedas volver a ser. Y convertido en cenizas te evaporas con gran parte de lo que fue tu mundo...eso si, estuviste hasta el último momento observando uno de los espectáculos mas bellos, preciosos e irrepetibles que la madre naturaleza puede darte: una mujer.

Sinceramente, en semejante situación y aunque me acojone, yo tampoco huiria...me gusta demasiado el espacio.

5 comentarios:

  1. Primero de todo decir que como siempre tus dotes de escritura son fantásticos. Debo añadir que si, que los hombre son muy calzonazos y caen demasiado rápido bajo los embrujos del sexo contrario, cuando lo que deberían hacer es seguir siendo ellos mismos y tener una relación de iguales sin que nadie pierda su espacio, vale, una relación puede cambiar a una persona, pero no tiene que dejar de ser ella misma, y si lo hace porque la otra persona se lo dice... no puede ser bueno. Lo dicho, eso son para mi calzonazos... pero cada uno a lo suyo, esta claro XD
    Perfecto como siempre! me ha gustado! Sigue en ello!!! ^^

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  2. El concepto real es que la mayoría de tíos lo que hacen es dar una imagen falsa de si mismos para intentar camelarse a susodicha mujer a la que siguen. Luego a la que pasa el tiempo acaban mostrandose como son y la cosa cambia XDD. Pero bien cierto es eso que muchos acaban siendo unos calzonazos y se amedentran ante las feminas. Más bien diría que lo hacen porque si no luego no tienen "tema" que es lo que realmente suele buscar un hombre en una mujer XDD. Por suerte en mi caso no he llegado a ese punto y he sido yo mismo siempre aunque claro sentimentalmente exponenciado porque es lo que tiene el amor cuando uno se enamora por primera vez XD. Y bien lo sabe el dueño de este local que a pesar de eso nunca le he dejado de lado ni lo pienso hacer. Y aunque siempre malinterpreta todo lo que hago nunca lo hago de mala fé =_=U.(bueno él ya me entiende. Hoy dejo propina extra por el tema que es bastante interesante y me recuerda a un clon que viene a visitarme en días aleatorios y momentaneos. Saludos :3

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  3. Enormes, suculentas y generosas propinas estas que veo aqui. Cierto es que el tema tiene mucha mas miga de lo que en un principio aparenta (y es curioso que cuanto mas interés pueda haber, mas pequeño es el tocho de mis pensamientos que aqui plasmo).

    Como bien conoceis todos, la sabiduria del Anónimo 1 es de niveles bien elevados y estoy completamente de acuerdo a lo que dice, es siempre interesante aprender esos conocimientos y añadirlos en mi escasa IA si aún quedan lineas de código disponibles. Calzonazos o simplemente hombres sin personalidad propia, ambos son dos descripciones para la misma lacra.

    Y como bien menta el señor Zengar un poco mas abajo, cierto es que ese comportamiento y otros aún mas patéticos (ohhh, aún resuena en mi save game la voz aterciopelada de un amigo al hablar con su respectiva parienta por el móvil) de los cuales no haré mas mención para no bugear el Bar de Barbón, están encaminados al mismo objetivo que bien todos conocemos.

    Y creo que todos en gran o pequeña medida hemos sido afectados por el fenómeno clónico...aunque algunos hemos vivido para contarlo, otros...desgraciadamente, no.

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  4. Si, cuando te ponen un clon en la vida llega un punto que no sabes ni como actuar porque delante tuyo no está la misma persona que conoces o conociste. Rescatar este tipo de personas en ocasiones es completamente imposible a si que lo único que se puede hacer es esperar y que el tiempo diga las cosas XD.

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  5. Y una propinilla extra que siempre bien, es cierto que cuando se entra en el "estado clónico" es complicado escapar, ahi el único que es capaz de elegir salir o quedarse en el, es la persona que esta mismamente encerrada...normalmente bajo su propia voluntad, cosa que hay que entender y respetar.

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